BRASIL

F-X2: FAB habría elegido el F-18 Super Hornet?

Los documentos obtenidos por la preferencia espectáculo ISTOÉ para la Fuerza Aérea F-18 de combate EE.UU.. La tendencia es que Dilma Rousseff cumple con los deseos de los militares. Un informe sobre el análisis de la Comisión de Programa Aviones de Combate Coordinador (COPAC) de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), obtenido exclusivamente por Istoé, debe provocar un giro en el concurso para la compra de un luchador que arrastra desde que el gobierno de Cardoso. El artículo muestra que, contrariamente a la especulación que rodea a la F-X2, FAB optado por EE.UU. el caza F-18 Super Hornet, fabricado por Boeing.Entre los competidores son el francés Rafale y modelo sueca Gripen NG . El informe fue preparado por dos años, pero que había sido dejado de lado por el entonces ministro de Defensa, Nelson Jobim. En la oportunidad, el ministro tomó la preferencia Palacio de Planalto para el Rafale, una opción política que no tuvo en cuenta el análisis técnico que figura en el documento elaborado por la Fuerza Aérea. El ex presidente Lula llegó a hacer pública su preferencia por las señales de Francia y emitido con frecuencia exagerada proximidad al ex presidente de Francia, Nicolas Sarkozy.

 

Dada la predilección por los aviones de la FAB de EE.UU., la pregunta ahora es ¿cuál será la decisión final de la presidenta Dilma Rousseff. La tendencia es acompañar el informe técnico. Rousseff reveló que los asesores están listos para golpear el martillo sobre los combatientes antes de la expiración de las propuestas comerciales el 31 de junio. Lo que interesa a él, el presidente ha dicho, es saber que las empresas puedan ofrecer más ventajas para el desarrollo del país y la FAB asegura que la compra de la modelo estadounidense es la más ventajosa. Cuestiones tales como el coste, coste de mantenimiento, entrega y desempeño operacional se analizan en profundidad en el informe. El documento muestra a la FAB, por ejemplo, que el F-18 tiene un costo de $ 5,4 mil millones para el paquete de 36 aeronaves. Es casi la mitad de los $ 8200 millones presupuestados en el Rafale. El Gripen NG, ofreció US $ 4,3 mil millones, es el más barato de los tres, pero se está desarrollando un avión nunca probado en combate en la versión ofrecida, reflexiona sobre la FAB.

 

El peleador francés, y más caro que los otros, tiene tiempo de vuelo valor de $ 20.000 Double Jet (EE.UU. $ 10.000) y tres veces el sueco (EE.UU. $ 7000). Para justificar la preferencia por los cazas estadounidenses, el informe trae otro hecho, nunca se mencionó en los debates anteriores sobre el FX-2: las armas utilizadas en el Super Hornet es más económico y tiene una mayor diversidad de sus competidores. En el documento, el FAB también alertar a la necesidad de una solución inmediata en el programa de combate, debido al riesgo de la vulnerabilidad que Brasil estará expuesto antes. "La importancia estratégica de la F-X2 se hace evidente ante un cuadro de obsolescencia", advierte la FAB. Otro documento obtenido por informar de la Istoé también puede pesar la decisión del presidente. Se trata de un proyecto de cooperación estratégica firmado en secreto entre Embraer y Boeing, en el que la empresa de EE.UU. - el mayor fabricante mundial de aviones - se compromete a entregar el más alto off-set del programa (contraparte) que jamás haya ofrecido ningún EE.UU. país no perteneciente a la OTAN.  

El acuerdo prevé, por ejemplo, el apoyo a la comercialización de Super Tucanos A-29 aviones de transporte y el KC-390 en los mercados inaccesibles a Brasil. También está prevista la construcción de un avión de entrenamiento conjunto para los pilotos, lo que podría ser vendido a los países de América Latina, la integración de los armamentos en Super Tucanos y el desarrollo de un jet de quinta generación polivalente para ser comercializados en todo el mundo. En un gesto sin precedentes, Boeing se compromete aún a abrir un centro de tecnología en Brasil. Oficialmente, Embraer dice desconocen el documento, pero se asegura de que usted es capaz de trabajar en asociación con cualquiera de los proveedores. En una reciente reunión con el comandante de la FAB, Juniti Saito , Presidente Dilma fue enfático. "Tenemos que ayudar a Embraer", dijo.No estaba claro si se había decidido ya por el F-18, pero los asesores asegurarse de que nunca el análisis técnico pesaba tanto.